Año XX. Edición 117. Mayo Junio 2023
Año XX. Edición 117. Mayo Junio 2023
Año XX. Edición 117. Mayo Junio 2023
Año XXI. Edición 122. Marzo Abril 2024
Luxación patelar en caninos
PALABRAS CLAVE: Luxación patelar > rótula > articulación > predisposición genética > etiología multifactorial
Resumen
La luxación patelar es una afección común en perros donde la rótula se desplaza de su posición normal en la articulación de la rodilla. Afecta más a razas pequeñas y se ha identificado una predisposición genética en algunas razas. El diagnóstico se basa en la inestabilidad patelar clínica y requiere imágenes para evaluar la alteración. El tratamiento varía según el grado de luxación, desde opciones conservadoras hasta cirugía para corregir la luxación y prevenir complicaciones. La etiología multifactorial implica desalineación del mecanismo cuádriceps y anomalías óseas, con una incidencia mayor en hembras. El examen físico incluye evaluación de la marcha y pruebas de manipulación para determinar el grado de luxación. Las pruebas de imagen son fundamentales para confirmar la luxación y evaluar cambios degenerativos. Además, existen tratamientos alternativos como la terapia física y una nutrición adecuada. En resumen, la luxación patelar en perros es una condición ortopédica común que requiere un enfoque integral para su manejo, considerando tanto opciones conservadoras como quirúrgicas, junto con terapias complementarias y medidas preventivas.
Abstract
Patellar luxation is a common condition in dogs where the patella dislocates from its normal position in the knee joint. It affects smaller breeds more and a genetic predisposition has been identified in some breeds. Diagnosis is based on clinical patellar instability and requires imaging to evaluate the alteration. Treatment varies depending on the degree of luxation, ranging from conservative options to surgery to correct the luxation and prevent complications. The multifactorial etiology involves misalignment of the quadriceps mechanism and bone abnormalities, with a higher incidence in females. Physical examination includes gait assessment and manipulation tests to determine the degree of luxation. Imaging tests are crucial to confirm the luxation and evaluate degenerative changes. Additionally, alternative treatments such as physical therapy and proper nutrition are available. In summary, patellar luxation in dogs is a common orthopedic condition that requires a comprehensive approach to management, considering both conservative and surgical options, along with complementary therapies and preventive measures.
Introducción
Una luxación patelar es una condición ortopédica muy común en perros, en la que la rótula, también conocida como patela, se desplaza fuera de su posición normal en la articulación de la rodilla. Esto puede ocurrir hacia lateral, o hacia medial con respecto a la articulación. Se basa en la evidencia clínica de inestabilidad patelar y requiere imágenes diagnósticas para evaluar la alteración y determinar el tratamiento más adecuado.
La incidencia de la luxación rotuliana en caninos varía en función del tamaño de la raza, siendo significativamente mayor en perros de razas pequeñas en comparación con las de mayor tamaño, con una disparidad de hasta 12 veces (Bosio F, 2017). Se ha observado que las hembras presentan una mayor predisposición a desarrollar esta afección en comparación con los machos (WA., 1972). Aunque la mayoría de los casos diagnosticados involucran luxación unilateral, la bilateralidad también es una presentación común. Este trastorno suele identificarse en perros jóvenes, generalmente menores de 3 años y con una prevalencia del 7% en cachorros (American College of Veterinary Surgeons, 2024).
Entre las razas más propensas a sufrir de esta patología se incluyen el Caniche, el Pomerania, el Yorkshire Terrier, el Chihuahua y el Bulldog Francés, entre otras (American College of Veterinary Surgeons, 2024; Bosio F, 2017). La predisposición genética a padecer luxación patelar es una realidad en perros, siendo más común en razas pequeñas. Algunas razas, como el Akita o el Shar-Pei, pueden presentar la patela ubicada demasiado alta ("patela alta") o anormalmente baja ("patela baja"). Además, en perros con deformidades esqueléticas graves, como desviación de la tuberosidad tibial y torsión o angulación de las extremidades, la luxación patelar puede ser palpable. Incluso, estudios genómicos han identificado anomalías cromosómicas implicadas en la luxación rotuliana en razas caninas específicas, como el Retriever holandés de pelo liso y el Pomeranian (Lavrijsen IC, 2013).
En cuanto al tratamiento, este puede ser conservador o quirúrgico, dependiendo del grado de luxación y la presencia de complicaciones degenerativas en la articulación. La luxación patelar en perros es un trastorno de etiología y patogenia multifactorial. Aunque se considera principalmente congénito y relacionado con el desarrollo, también puede manifestarse como consecuencia de un traumatismo que genere desgarros o elongaciones en la cápsula articular y la fascia, resultando en una inestabilidad femoropatelar. La desalineación del mecanismo cuádriceps emerge como un elemento clave en su desarrollo (Arturs GI, 2006).
Cualquier alteración en este mecanismo, durante la fase de crecimiento, puede provocar modificaciones anatómicas en el fémur distal y la tibia proximal, induciendo así la inestabilidad patelar subsiguiente.
Además, la falta de presión fisiológica ejercida por la rótula sobre el cartílago articular del surco troclear durante el crecimiento puede obstaculizar la formación adecuada de un surco troclear profundo y amplio, dando lugar a una hipoplasia troclear. Factores adicionales como una inclinación anómala del cuello femoral y torsiones internas o externas en los huesos pueden contribuir a las deformidades articulares.
La evaluación de la profundidad del surco troclear y la posición de la rótula dentro del surco pueden realizarse mediante palpación, lo que añade un elemento diagnóstico relevante en la evaluación clínica de esta condición.
El examen físico incluye evaluación de la marcha, movimientos de flexión-extensión de las articulaciones y evaluación del rango de movimiento de la rodilla. Además, se realiza una prueba de manipulación para determinar la inestabilidad, ubicación y grado de luxación de la rótula. Las pruebas de imagen, como radiografías, son fundamentales para confirmar la luxación, evaluar cambios degenerativos y detectar anomalías óseas. En casos graves, se pueden requerir imágenes avanzadas como tomografía computarizada (CT) para obtener mediciones precisas y planificar la corrección quirúrgica.
Los grados de luxación patelar en perros se clasifican de la siguiente manera:
Grado I: la rótula puede luxarse manualmente, pero vuelve a su posición normal al soltarla.
Grado II: la rótula se luxa con la flexión de la rodilla o con manipulación manual y permanece luxada hasta que se extiende la rodilla o se reemplaza manualmente.
Grado III: la rótula está luxada continuamente y puede ser reemplazada manualmente, pero se luxará espontáneamente al retirar la presión manual.
Grado IV: la rótula está luxada continuamente y no puede ser reemplazada manualmente.
Ilustración 1. Cambios esqueléticos asociados a la luxación patelar (Fuente: Veterinary Medicine: Research and Reports).
NOTA: A la izquierda, vista craneal normal del miembro posterior; obsérvese el mecanismo del cuádriceps centrado sobre el fémur, así como la rótula asentada en el surco troclear. Las imágenes de grado I-IV demuestran cómo la relación anormal entre el fémur distal y la tibia proximal afecta a la posición de la rótula. Las vistas transversales muestran la rotación interna de la tibia con respecto al fémur y la consiguiente luxación de la rótula que en los grados III y IV anulan completamente el surco troclear medial. También las luxaciones de grado III y IV se caracterizan por un surco poco profundo.
La presentación clínica de la luxación patelar en perros puede variar, generalmente incluye cojera intermitente o continua, con ocasional levantamiento de la extremidad Durante la evaluación de la marcha, es común observar que el paciente intenta estirar el miembro hacia atrás para permitir que la rótula vuelva a su lugar en el surco cuando está luxada. La luxación lateral suele producir una sintomatología más grave con respecto a la medial. Los perros con luxación patelar de grado I suelen ser asintomáticos, mientras que los de grado II pueden presentar una cojera intermitente asociada a "saltos" (DeCamp CE, 2015). En casos más graves (grado III y IV), se observa una cojera persistente y una postura anormal. La luxación bilateral medial puede provocar una marcha anormal y una deformidad en varo de la rodilla. Por otro lado, la luxación lateral hace que las rodillas estén cerca una de la otra mientras las extremidades distales están abducidas.
El tratamiento de la luxación patelar en perros varía según el grado de la luxación. Para casos leves (Grado I y II), donde la rótula puede luxarse manualmente, sin embargo, vuelve a su posición normal al soltarla o permanece luxada hasta que se extiende la rodilla o se reemplaza manualmente, el tratamiento conservador puede ser una opción. En casos más graves (Grado III y IV), donde la rótula está luxada continuamente y no puede ser reemplazada manualmente, se recomienda la intervención quirúrgica para corregir la luxación y limitar el desarrollo de anomalías esqueléticas o enfermedad articular degenerativa. Las técnicas quirúrgicas pueden implicar tanto procedimientos de tejidos blandos como técnicas óseas, a menudo combinando varios procedimientos para lograr la corrección de la luxación.
Existen tratamientos alternativos a la cirugía que pueden ser considerados para la luxación patelar en perros, especialmente en casos de grado I donde la sintomatología es leve y la osteoartritis es mínima. El manejo conservador puede incluir la administración de fármacos antiinflamatorios no esteroides (AINEs) junto con otros analgésicos para reducir el dolor. Además, la terapia física y terapias complementarias como masajes e hidroterapia pueden ser útiles para mejorar la condición del perro. Estos enfoques no quirúrgicos pueden ser considerados en casos leves donde la cirugía no es necesaria o como parte de un plan de tratamiento integral en combinación con otras medidas terapéuticas. Así mismo, la nutrición también juega un papel importante en el manejo de la luxación patelar en perros. Controlar el peso del paciente y ofrecer una dieta de alta calidad es esencial para reducir el estrés en la articulación y prevenir complicaciones adicionales, además de disminuir el desgaste articular posiblemente implicado. Una dieta equilibrada y adecuada, con ingredientes funcionales como el colágeno tipo II, puede contribuir en la reducción del dolor articular (M.DAltilio, 2008; R.C Gupta, 2011). Combinar una alimentación adecuada, como NUPEC® Razas mini, con colágeno tipo II, con otros tratamientos como terapia física, medicamentos antiinflamatorios y terapias complementarias puede ser parte de un enfoque integral para el manejo de la luxación patelar en perros sin dejar de lado la resolución ortopédica quirúrgica pertinente.
Bibliografía:
-
American College of Veterinary Surgeons. (2024). Obtenido de https://www.acvs.org/small-animal/patellar-luxations/
-
Arturs GI, L. H. (2006). Complications associated with corrective surgery for patellar luxation in 109 dogs. Veterinary Surgery, 149.
-
Bosio F, B. A. (2017). Prevalence, Treatment and outcome of patellar luxation in dogs in Italy. A retrospective multicentric study. Veterinary and comparative Orthopaedics and Traumatology, 364-370.
-
DeCamp CE, J. S. (2015). Piermattei and Flo´s Handbook of small Animal Orthopaedics and Fracture repair. St. Louis, MO, USA.: Elsevier.
-
JK., R. (1993). Canine patellar luxation. Veterinary Clincs of North America: Small Animal, 855-868.
-
Lavrijsen IC, L. P. (2013). Genome-wide survey indicates involvement of loci on canine chromosomes 7 and 31 in patellar luxation in flat-coated retrievers. Veterinary Journal, 64.
-
M.DAltilio, A. P. (2008). Therapeutic Efficacy and Safety of Undenatured Type II Collagen Singly or in Combination with Glucosamine and Chondroitin in Arthritic Dogs. Toxicology Mechanisms and Methods, 189-196.
-
R.C Gupta, T. C. (2011). Comparative therapeutic efficacy and safety of type-II collagen (UC-II), glucosamine and chondroitin in arthritic dogs: pain evaluation by ground force plate. Animal Physiology and Animal Nutrition.
-
WA., P. (1972). Sex, size and breed as risk factors of patellar luxation. Journal of American Veterinary Medicine Association, 633-634.